Patentan cura contra el cáncer

Hoy leyendo me he encontrado con un interesante artículo de Presesc.com acerca de un nuevo enfoque científico para combatir al cáncer. La noticia, que podría ser fantástica si la nueva técnica funcionase tan bien como explican los científicos de la Universidad John Hopkins que la han ideado, me ha dejado también un pelín triste. ¿Por qué? Pues porque estos mismos científicos que se merecerían el Premio Nóbel si su idea curase el cáncer, están patentando el tratamiento. En caso de que funcione ¿quién podrá acceder al remedio? ¿los ciudadanos de a pie de los países ricos? ¿sólo los ricos del planeta? ¿se le negará el remedio a los marginados? Pues si, supongo que pasará como con el SIDA, una enfermedad crónica en occidente gracias a los retrovirales, y una epidemia mortal e imparable en Asia y África. Definitivamente este mundo no es justo.

Volviendo al nuevo tratamiento, os hago un resumen de lo que pone el artículo:

Investigadores de la Universidad Johns Hopkins University podrían haber encontrado una forma de matar las células cancerígenas sin radiación ni compuestos químicos tóxicos. El grupo está iniciando el proceso de patente de la idea. Este nuevo enfoque, que emplea azúcares, podría tener un potencial real en la lucha contra el cáncer. No es el primer enfoque basado en azúcares, se comenta en el artículo, pero es (según estimación de los investigadores) el que más éxito ha tenido.

Extraído del artículo: “Sampathkumar y sus "colegas" se basaron en unos hallazgos que tuvieron lugar hace 20 años, y que versaban sobre una cadena corta de ácidos grasos llamada butirato, que podía ralentizar la expansión de las células cancerosas. En la década de los 80, los investigadores descubrieron que el butirato (que se forma de modo natural en altos niveles en el sistema digestivo, gracias a una bacteria simbiótoca que se alimenta de fibra) podía restaurar el funcionamiento de una célula saludable. Ahora los investigadores se han centrado en un azúcar llamada N-acetil-D-manosamina (o ManNAc para abreviar) y han creado una molécula híbrida enlazando el ManNAc con el butirato.
El híbrido penetra facilmente la superficie de la célula y luego se divide por la acción de las enzimas que hay en su interior. Una vez dentro de la célula, el ManNAc es procesado por otro azúcar llamado ácido siálico, que juega un papel central en la biología del cáncer, mientras que el butirato orquesta la expresión de los genes responsables de la detención del crecimiento incontrolado de las células cancerígenas”.