El Código Penal establece los 13 años cómo la edad mínima para que los chicos y chicas puedan mantener relaciones sexuales consentidas con un adulto. Recientemente, el PNV ha presentado una proposición no de ley en el Congreso en la que solicita la elevación de esta edad hasta, posiblemente, los 16 años, así como en el endurecimiento de las penas para los pederastas.
La iniciativa contempla, además, un incremento sustancial de las penas para los delitos sexuales cometidos con menores de edad, así como penas de inhabilitación para el ejercicio de la patria potestad, tutela o cargo público.
"En esta sociedad, el adolescente de 13 años no tiene capacidad para decidir sobre el consentimiento responsable.
Es un momento en el que el menor necesita ser protegido y atendido por los padres, que deben ser los amortiguadores de las tensiones internas y externas que el joven por sí mismo no puede controlar", señala el psicólogo Manuel Hernanz Ruiz.
La doctora María José Mardomingo, jefa del servicio de Psiquiatría infantil del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, defiende como "mucho más razonable la edad mínima de 16 años para consentir relaciones sexuales en lugar de los 13, tanto por madurez emocional como intelectual. Que la sociedad transmita a los jóvenes que los 13 ya es un momento adecuado para iniciarse en el sexo es un error. Una cosa es que deba percibirse como algo normal y otra que la edad apropiada de inicio en las relaciones íntimas sean los 13. Cada cosa debe ser a su tiempo".
Luego tambien existen los embarazos no deseados, otro problema para la sociedad!!
2 comentaris:
Es normal que a los 13 años se quiera experimentar con la sexualidad, pues las hormonas empiezan a revolucionarse, pero a esa tierna edad no se es consciente de los peligros que puede entrañar la práctica de sexo no seguro, ya no en forma de embarazos no desados, sino más bien en forma de enfermedades de transmisión sexual, que están a la orden del día. Pero no creo que la solución sea aumentar la edad legal para tener relaciones, porque las leyes se pueden romper, yo creo que se debería invertir en campañas de concienciación PARA LOS PADRES, sobre cómo y cuándo hablar a los hijos de ese tema, aún tabú en muchas familias.
Estic d'acord amb el que esteu dient. I la solució pot anar per l'educació sexual, començant a casa i continuant a l'escola, tot i que a eixa edat, en moltes ocasions no s'escolta o no es té en compte el que diuren pares i professors, i si el que diuen companys i amics; i això en bastants ocasions decanta la balança cap a la necessitat de "provar" allò que està prohibit.
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