divendres, 3 de maig del 2024

VACUNAS ARNm


Hace 228 años que se desarrolló la primera vacuna, hecha por el médico británico Edward Jenner. Hoy en día se han hecho los primeros experimentos de vacunas de ARNm contra los tumores cancerigenos. Esta vacuna experimental, desarrollada por investigadores de la Universidad de Florida y probada por 4 pacientes adultos. Resultó tener buenos resultados. 


Ahora bien, ¿Como se ha realizado este tipo de vacunas y porque las vacunas de ARNm son valiosas en el tratamiento del cáncer?

En primer lugar, para dichas vacunas se estrajo material genético, ARN, del tumor extirpado de los pacientes afectados. Y, a continuación, se envolvió en el nuevo envase de alta tecnología de nanopartículas lipídicas biocompatibles, para que las células tumorales "parecieran" un virus peligroso cuando se reinyectaran en el torrente sanguíneo  y provocaran una respuesta del sistema inmunitario. Creando así, una vacuna personalizada para cada paciente con el objetivo de aprovehar al máximo su sistema inmunitario. 

Cabe destacar, que estos experimentos mayoritariamente fueron probados en animales, como es el caso de los ratones y cuatro perros afectados por los tumores cancerigenos. Dando así, un resultado positivo, donde los animales afectados pudieron vivir más tiempo de lo esperado y sin los síntomas previstos de la enfermedad.

Estas vacunas son similares a las vacunas que se tuvieron que crear para hacer frente al Covid-19, pero con una administración de nueva inginieria dentro de la vacuna. Y una personalización única para cada individuo. 

En segundo lugar, las vacunas de ARNm tienen un alto potencial en el tratamiento del cáncer por varias razones:

  1. Estimulación de la respuesta inmune, las vacunas de ARNm están diseñadas para instituir a las células del sistema inmunológico a reconocer las células cancerosas como extrañas y matarlas.
  2. Especificidad, las vacunas del ARNm pueden adaptarse para expresar antígenos específicos que se encuentran en las células cancerosas, lo que las hace muy específicas para cada tipo de cáncer y, potencialmente, para cada paciente. 
  3. Bajo riesgo de efectos secundarios, las vacunas de ARNm generalmente se consideran seguras y bien toleradas porque no utilizan virus vivos y no están integrados en el ADN del huésped. 
  4. Memoria inmunológica, una vez que el sistema inmunológico aprende a reconocer y atacar las células cancerosas, puede mantener una memoria inmunológica a largo plazo, lo que puede ayudar a prevenir que el cáncer reaparezca.