PSICOLOGÍA BARATA ANTICRISIS

     A causa de la grave crisis económica el número de personas que sufre depresión o ansiedad ha aumentado un 10% según un informe de la Junta de Andalucía. Estas personas no pueden permitirse ir a un psicólogo a causa de la grave situación económica en la que se encuentran.
     La solución para este problema sería acceder al sistema público sanitario, para recibir atenciones psicológicas, pero la lista de espera es demasiado extensa. Esto ha impulsado a José Álvarez a crear la asociación "Mentes Abiertas". Esta asociación ofrece sesiones a bajos costes. Una sesión de una hora, que normalmente cuesta de los 80 a los 100 € esta asociación la oferta por 20 €, además la asociación cuenta con profesionales que pueden prestar ayuda de cualquier tipo, pueden ofrecer terapias de  psicología forense, deportiva, terapia de aceptación y compromiso, de pareja o familia, Gestalt...
     Los bajos precios, pueden hacer creer que los pacientes piensen que no van a recibir ayuda adecuada a sus problemas. Los miembros de la asociación entienden esta desconfianza pero aseguran que son profesionales que trabajan a nivel privado y tienen experiencia. 
     Otro problema que puede tener la asociación y que también a tenido en cuenta, al igual que la desconfianza de los clientes, es la competencia. Los precios que se ofrecen en "Mentes Abiertas" y los que se ofrecen en una asociación normal tienen una diferencia abismal. Los miembros de esta asociación alegan que  el Colegio Oficial de Psicólogos no establece un precio mínimo legal, por lo que pueden ofertar cualquier precio, y piden comprensión ya que  es una iniciativa social. 
     Por otro lado, esta iniciativa puede ayudar también a jóvenes psicólogos recién licenciados a ganar experiencia o simplemente a acceder a un puesto de trabajo. Las únicas condiciones son estar licenciado en psicología y tener homologación como psicólogo sanitario.
     En definitiva, esta iniciativa, puede ayudar a mucha gente, ya que acerca la psicología a todo el mundo y puede ayudar a muchos jóvenes psicólogos a tener un puesto de trabajo. 

Este artículo pertenece al periódico El Mundo, 26/01/12