diumenge, 27 de gener del 2008

Volcanes dormidos entre masías y castillos, en España

A unos 50 kilómetros de Girona, encontramos multitud de formas de paisaje volcánico como son treinta conos volcánicos, cráteres, bosques de hayas sobre ríos de lava y barrancos de paredes basálticas, producidos a causa de explosiones que tuvieron lugar hace muchos años. Podemos verlos en el Parque Natural de la Garrotxa, donde además de ver montes naturales, podremos ver pueblos integrados en este paisaje tan volcánico.

Esta zona volcánica acabó de formarse hace 11000 años, cuando se produjo la última erupción. Desde entonces, los volcanes permanecen dormidos aunque no se puede decir que estén del todo extinguidos.

Uno de los volcanes que pertenecen a esta zona es el Croscat, es el volcán más joven de la península Ibérica, tiene un corte impresionante que deja al descubierto sus pliegues y estratos. En este paisaje podemos encontrar también el Fajeda d'en Jordà, un inmenso bosque de hayas que se encuentra sobre lavas petrificadas.

Otro volcán que llama mucho la atención es el volcán Montsacopa, que se encuentra en pleno casco urbano del pueblo de Olot. También el pueblo de Castellfollit de la Roca, un pequeño pueblo que se encuentra sobre un inmenso barranco basáltico de más de 50 metros de altura.

En este post podemos observar la cantidad de entramados volcánicos que se pueden encontar en una zona relativamente reducida y muy concreta de la península Ibérica y que, por lo general, no es muy conocida por sus volcanes.



3 comentaris:

violeta pitarch ha dit...

Resulta sorprendente que relativamente cerca de aqui se encuentren unos cuántos volcanes. Que aunque no están activos, como tu dices,se observa muy bien el interior del volcán Croscat. Incluso en el cráter del volcán de Santa Margarida hay una ermita y el cono está recubierto por un hayedo. Ésa zona la visité hace unos cuántos años y todavía tengo recuerdos de ella.

Sergio Mestre ha dit...

Siempre he querido visitar este rincón.

laura ha dit...

Es escalofriante saber que en estos volcanes o mejor dicho, en sus alrededores viva gente, cuando aun no es seguro que esten en extinguidos.