Todos sabemos que hacer ejercicio y llevar una dieta saludable es muy importante en el tratamiento y en la prevención de la obesidad pero muchas personas no saben la relación existente entre ambos factores.
Según un estudio realizado se comprobó que tener una buena actividad física supone una mejora de la dieta.
La práctica de ejercicio supone una mejor resistencia a las múltiples tentaciones alimenticias, por lo tanto el ejercicio influye en un mejor control del apetito ya que aporta beneficios como el aumento de la sensibilidad a las señales fisiológicas de saciedad, pero también modifica las respuestas hedónicas a los estímulos de comida.
Las políticas sociales deberían facilitar y fomentar la actividad física y el deporte en la sociedad en general mediante el uso de transporte público o el acceso a zonas peatonales e instalaciones deportivas.
Yo pienso que hacer ejercicio y tener una dieta sana es muy importante. Todo el mundo debería practicar algún deporte o hacer cualquier actividad física diariamente e intentar llevar una dieta equilibrada,segura y completa.
1 comentari:
Estoy muy de acuerdo en todo lo que has comentado. Al hacer ejercicio, psicológicamente te sientes más sano y mejor contigo mismo, por lo tanto es normal que al haber hecho un esfuerzo por conservar nuestra figura resistamos mejor las tentaciones de ingerir alimentos que perjudiquen nuestra dieta.
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