dimarts, 1 d’abril del 2008

Las reservas de glúcidos

La mayoría de glúcidos que ingerimos son transformados en glucosa y absorbidos por el intestino. Van a parar al hígado, donde se transforman en glucógeno (sustancia de reserva de energía). Esta sustancia se va almacenando para poder utilizarla en momentos en los que no hay glucosa.
El glucógeno también se almacena en los músculos, aunque aquí su función es para producir energía para llevar a cabo el movimiento del músculo en situaciones que requieran rapidez o fuerza.

Cuando se necesita glucosa y no hay disponible, el glucógeno se convierte en glucosa y pasa a la sangre para ser transportada a los tejidos que la necesiten.

El glucógeno puede ser almacenado en el hígado hasta una cantidad máxima de 100gr, y de 200gr en los músculos. Si se alcanza este límite, el exceso de glucosa en la sangre se transforma en grasa y se acumula en el tejido, y entonces pasa a ser reserva de energía a largo plazo.

Información en el libro y aquí

3 comentaris:

Sara Cuervo González ha dit...

Me ha parecido una buen buena idea informarnos sobre este tema de la reserva de glúcidos, ya que podemos entender de esta forma el recorrido que hace por todo nuestro organismo la glucosa, para ser finalmente una reserva de energía vital y necesaria para nuestro cuerpo.

marta ha dit...

Es interesante la información dada por mi compañera sobre los glúcidos porque te ayuda a entender mejor al organismo, y ade,ás es un buen repaso para los examenes, ya que esta resumido y te ayuda a recordar, además de informarte de cosas que no sabes.

Lledó Alegre Zurano ha dit...

aunque no es una noticia, es bastante interesante para comprendre mejor este tema, leer articulos como este siempre ayudan