Es necesario mucho estudio y práctica para interpretar una imágen médica correctamente, pero gracias al gran desarollo de la vista de las palomas pueden aprender a diferenciar tumores en imágenes histológicas y radiológicas en poco tiempo.
El estudio ha sido llevado a cabo por Richard Levenson, profesor de patología, y Edward Wasserman, que se dedica al estudio de procesos cognitivos en los animales. Afirman que lograron aprender mediante patrones como el color o el brillo de la imagen, siendo capaces de generalizar en otras imágenes diferentes. Pero tiene un truco, ya que a diferencia de los seres humanos, cuando se les pedía una tarea diferente de la que realizaban no eran capaces de extrapolar de unas imágenes a otras. Levenson bromea diciendo que por muy buenas que lleguen a ser está complicado que se implanten en los hospitales, pero concluye dejando abierta su utilidad para mejorar los procesos de detección actuales.
Fuente de la noticia: SINC
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