Estos "bioparches" son pioneros en similar las características mecánicas y estructurales del miocardio. Se trata de una malla de celdas (con gran extensibilidad) donde se cultivan las células que posteriormente podrían implantarse en el corazón con un soporte fabricado mediante polímero biodegradable que acabaría siendo absorvido por el cuerpo. Respecto de las propiedades mecánicas del tejido, vendrían conferidas por la variedad del tiempo de consolidación de la malla.
Las primeras pruebas realizadas con ratas han conseguido un gran éxito, ya que las células crecen en la dirección correcta y tienen propiedades electrofisiológicas casi idénticas a las del miocardio.
El sistema debe ser ser aún perfeccionado, ya que el grosor de la malla es demasiado fino para reconstruir el miocardio y se apunta a una malla mas gruesa compuesta por varias capas.
Pese a ello, los investigadores del HST han conseguido un gran avance, pues si el sistema se perfecciona podrá ser implantado en personas con problemas de corazón.
Enlace directo a la notícia, publicada el 02/11/08 en ADN.
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