dissabte, 1 de novembre del 2008

LA VERDADERA AUTOPISTA DE LA INFORMACIÓN

Imagen captada con un DSI


"Neguémonos a aceptar que ese órgano gris y uniforme, que estamos habituados a ver a través del escáner, es el verdadero cerebro". Éstas son las palabras de Van Wedeen, especialista en Imagen Biomédica del Hospital de Massachusetts (EE.UU.), quien ha logrado obtener imágenes en color y 3 dimensiones de las fibras nerviosas gracias a las que gozamos de vista, oído, olfato, movimiento...

Gracias a esas imágenes, hemos podido observar que el cerebro es una extensísima red de autopistas que se cruzan, y que guardan una geometría especialmente "diseñada" para su fin, que no es otro que el de capacitar a los animales de VIDA.

Todo el trabajo de Van Wedeen se basa en la resonancia magnética y las técnicas de difusión (DSI, en inglés (imagen)), que también se conocen como "tractografía". Además, todo este trabajo se ha recogido en prestigiosas revistas del mundo de la neurociencia tales como "Brain" y "Neuroimage".

Wedeen explica a la edición on-line del periódico "El mundo" que para su trabajo se planteó que las fibras cerebrales podrían seguir el patrón de la difusión del agua, y que su objetivo principal era el de ver la verdadera anatomía del cerebro, no sólo superficialmente.

Esta perspectiva también fue usada por los autores de un trabajo que se publicó hace unos meses en "PLoS Biology", en el que se supo que en el cerebro existe un punto (kilómetro cero) del que parten todas las autopistas que lo recorren. Wedeen y su equipo aportan algo más: "no nos centramos en las direcciones más probables sino que analizamos todas las posibles conexiones."

Una de las cosas que se ha averiguado gracias al DSI es la superposición de las fibras nerviosas, pero como afirma Weeden: "el que ahora podamos verlas no supone el final de la historia sino solamente el principio."

Por esta superposición, para analizar el cerebro, no basta con diseccionar el cerebro y mirarlo con un microscopio, sino que se necesita un tecnología en tres dimensiones.

Esta tecnología se encuentra en el Centro de Imagen Biomédica Martinos, dependiente del Hospital de Massachusetts, en el que han analizado toda clase de animales que ha permitido conocer que, por ejemplo, en los roedores se presenta un desarrollo muy importante de las áreas de la memoria y el olfato, mientras que en los gatos, las localizaciones más desarrolladas son las asociadas al movimiento.

Por desgracia, esta técnica (el DSI) aún no está del todo desarrollada para seres humanos, por eso un ser humano vivo sólo puede permanecer unos 50 minutos debajo de un escáner; y no se puede tratar un cerebro de un fallecido porque las máquinas actuales no están suficientemente preparadas para estudiar un masa tan grande.

En conclusión, estas revolucionarias imágenes pueden tener muchas aplicaciones, como por ejemplo, ver cómo se desarrolla la mente con la edad, establecer el daño provocado por un trauma cerebral, observar la diferencia entre un zurdo y un diestro, o, en oncología, tratar las zonas afectadas por un tumor.

Aquí os dejo un vídeo en el que se aprecia esta nueva tecnología:



Link de la noticia: http://www.elmundo.es/elmundosalud/2008/10/30/tecnologiamedica/1225386542.html

1 comentari:

Paula González ha dit...

La imagen del cerebro es increible, la verdad, porque siempre nos la imaginamos gris pero verla tan colorida parece mentira. Creo que desde estos nuevos datos se podra analizar mucho mejor el cerebro gracias a sus conexiones. Pero, ¿qué ocurre si un humano esta más de 50 minutos bajo es escáner? ¿El cerebro tendría desperfectos? Supongo que con el tiempo habrá más datos de ello. Buena entrada Marta.